¡Es duro corregir! Sospecho que alguien ajeno a la enseñanza pensará ¡qué bien viven los maestros! Pero además de aguantar adolescentes, esos seres a mitad de camino entre la madurez y la infancia más incomprendida (la de un niño o niña con cuerpo de hombre o de mujer), que parecen mayores y son muchas veces unos críos, personas que muchas veces no aguantan sus propios progenitores, que son unos seres que sólo tienen amigos, y que tanto sus profesores/as como padres y madres son enemigos confesos, y que nunca aprecian el trabajo de nadie, tenemos que meterlos en vereda, educarlos en el sentido más básico y primario, darle valores, enseñarles a ser pacientes y mil cosas más...pero a los que hay que corregirles los trabajos, libretas, exámenes y otras actividades y que evidentemente no aprecia nadie. Pero ¡¡¡¡qué rebien bien los maestros!!!! – sentencia el pueblo- aunque ese coñazo que se llama corregir yo lo tengo que paliar escuchando o incluso, si puedo, viendo buena música, pues si no moriría en el intento.
Lo otro, lo educativo, no me cuesta trabajo alguno. La vertiente educativa es gratificante, la vertiente evaluadora es la más ingrata. Tirarte cuatro horas o más leyendo lo mismo, y muchas veces, eso que es lo mismo, está mal o es muy malo, -¡¡¡¡¡pero qué malos son los profesores!!!!!- es un plomo de mil demonios, así que hay que buscar consuelo en la música.
Hoy para corregir el examen global del segundo trimestre me he puesto el directo de Los Secretos.
Este disco del grupo madrileño y de título “Gracias por elegirme”, es la grabación de un concierto que tuvo lugar en Las Ventas el 10 de octubre de 2008, en conmemoración de los 30 años del grupo. Treinta años de buena compañía, conmigo y con todos. Este concierto, en el que aparecen junto a ellos, un gran número de invitados (Miguel Ríos, José María Granados, Conchita, Fito Cabrales y Carlos Raya, Manolo García, Joaquín Sabina, David Summers y Amaral) se publicó ese mismo año en una caja con dos CD y dos DVD (Gracias por elegirme - Las Ventas 10 octubre de 2008), y que tuve la inmensa fortuna de que uno de mis cuñados me lo regalara como regalo invisible, como una sorpresa de Reyes de ese año.
¡Gracias cuñado!
Este disco es un magnífico recopilatorio de la música de este grupo que me ha acompañado desde el archiconocido Déjame cuando uno todavía tenía pelo y pesada entre veinte o treinta kilos menos.
Las canciones de este disco son fantásticas, con un público entregado hasta la médula que hace los coros en todas las canciones. Las versiones de los invitados son realmente grandiosas, a destacar todas, pero las que van más allá de esto son el Nada más, con José María Granados, el de Mamá, y Por el bulevard de los suelos rotos, con la voz rota de Sabina.
De cualquier manera resaltar una canción u otra es injusto, todas están ahí por algo, pero como tengo mi corazoncito y reconozco que soy un sentimental me quedo con esa joyita desconocida de Balsera, insisto, reconozco que soy un sentimental. Bueno, así que entre el viernes por la tarde, el sábado por la mañana, parte del domingo y dos horas más del lunes he conseguido corregir. Para vuestra información han aprobado la inmensa mayoría. ¡Qué buenos son mis alumnos/as! , pero ¡qué bien viven los maestros!
Nota a pie de página: Esta entrada fue escrita en abril de 2012 , en concreto, desde 16 de ese mes, aunque fue escrita, justamente un año antes y ahora se ha trasladado aquí por cuestiones obvias.
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