Días de verano en los finales de los setenta. Obligaciones y responsabilidades, pocas. “Amistades”, muchas. Tras el riego de la mañana y quitar todo tipo de jaramagos, sí así lo exigía el guión, a partir de las doce y media quedábamos en casa de alguno de ellos, especialmente del que tenía el mejor equipo de música y poníamos lo que nos gustaba. Por los altavoces sonaban AC/DC, The Clash, Deep Purple, The Specials, o los Leño. Eramos tipos duros.
De entre los discos más escuchados Made in Japan, un doble álbum en directo de la banda inglesa de rock Deep Purple, grabado durante su primera gira en Japón, en agosto de 1972.
El disco, publicado originalmente en diciembre de ese mismo año y en los Estados Unidos en abril de 1973, fue uno de sus mayores éxitos comerciales del grupo y recibió buenas críticas. Los acordes de Smoke in the water, de hecho, creo que son los más imitados de la historia de la música.
La banda, encabezada por el gigante guitarrista Ritchie Blackmore , Ian Paice (batería) y Jon Lord (órgano) tenía por entonces como voz a Ian Gillan y a Roger Glover como bajo.
Parece ser que estaba en tránsito para pasar de un sonido más psicodélico al su seña de identidad: hard rock.
Fue el disco en directo lo que , para mí, marco su trayectoria. La banda no estaba muy entusiasmada con el hecho de grabar un disco en vivo hasta que la división japonesa de su compañía discográfica le comentó que sería positivo para generar publicidad. El grupo, que aunque insistió en supervisar la producción y de contratar para tal tarea a su antiguo ingeniero Martin Birch, no se mostró particularmente interesado en el lanzamiento del álbum, ni siquiera tras su grabación. El grupo rechazaba la idea de publicar un álbum en directo, ya que creía que era imposible de reproducir en un LP la calidad y experiencia de sus conciertos.
La gira por el país nipón fue un éxito, con un fuerte interés de los medios y una respuesta positiva por parte de los aficionados.
El álbum fue un éxito comercial, especialmente en los Estados Unidos, donde estuvo acompañado por la buena recepción del sencillo «Smoke on the Water» que alcanzó el top 5 del Billboard Hot 100, y mantuvo unas ventas constantes a lo largo de la década de 1970. A pesar de su longevidad, el disco continúa recibiendo elogios. Una encuesta a los lectores de la revista Rolling Stone situó a Made in Japan como el sexto mejor álbum en directo de todos los tiempos.
Deep Purple llegó a Japón el 9 de agosto, una semana antes del primer y concierto, con una calurosa recepción en la que recibió regalos y flores.
El disco se grabó en agosto de 1972, en conciertos desarrollados en Osaka – en el Festival Hall- y en el Nippon Budokan – el 17 de agosto- en Tokio.
Las entradas se agotaron casi inmediatamente, lo que hizo que la división japonesa de Warner Bros. Records quisiera grabar los conciertos para su publicación en un álbum en directo solamente en el país nipón. La banda finalmente aceptó la idea, pero insistió en si iba a salir a la venta, que se hiciera de manera adecuada. Gillan comentó al respecto: «Dijimos que elegiríamos el equipo, que usaríamos a nuestro ingeniero y que tendríamos la última palabra sobre que cintas iban a ser publicadas».
El grupo contrató al productor Martin Birch, que había trabajado en sus anteriores álbumes de estudio, para que grabara las actuaciones con un grabador de ocho pistas y posteriormente pudieran ser mezcladas por los propios músicos. Birch no estaba seguro de que la calidad de la grabación fuera satisfactoria, ya que el equipo que le suministró la Warner Bros. no tenía ningún control de balance y era demasiado pequeño. La banda optó por no interesarse por el resultado final y se concentró simplemente en realizar una buena actuación. Según John Lord el presupuesto para realizar el disco era de únicamente tres mil dólares
De los tres conciertos, el segundo concierto en Osaka fue considerado el más sólido de los dos para Birch, aunque a la banda le gustó más su actuación del 17 de agosto en Tokio. Pero de lo que aparece grabado la mayoría de las pistas provienen del segundo de Osaka. Sólo se utilizó una canción de la actuación del 15 de agosto, «Smoke on the Water», y se debió porque fue la única de las interpretaciones del tema en la que Blackmore realizó el riff inicial de manera correcta.
El bajista Glover quedó asombrado con «Doce o trece mil chicos japoneses estaban cantando con nosotros “Child in Time”» y lo consideró un punto culminante de su carrera. Lord destacó que sintió que la espontaneidad y la interacción entre los miembros y el público quedaron bien capturadas.
El quinteto comenzaba sus conciertos con «Highway Star» y los terminaba con «Lazy» y «Space Truckin'», y siguiendo las normas impuestas por Pete Towshend Blackmore destrozó su guitarra al final de «Space Truckin'» y la lanzó al público.
Como la banda no consideraba el álbum de vital importancia, sólo Glover y Paice se presentaron para la mezcla. Según Birch, Gillan y Blackmore nunca escucharon el resultado final. El grupo no deseaba que el disco saliera a la venta fuera de Japón y quería tener plenos derechos sobre las cintas, sin embargo, el álbum fue publicado , afortunadamente, mundialmente de todos modos.
El propio Glover se encargó del diseño artístico, que contiene una fotografía de la banda en color en la portada y en la contraportada, y varias imágenes en blanco y negro en la carpeta interior.
La discográfica aprovechó para poner en el mercado el sencillo «Smoke on the Water» ,que incluye la versión en directo de Made in Japan y la de estudio de Machine Head, y que se situó en el cuarto puesto del Billboard Hot 100. Una grabación de «Black Night», realizada en el concierto de Tokio, salió a la venta como cara B del sencillo «Woman from Tokyo» en Europa y como cara A en Japón.
La versión japonesa, titulada Live in Japan, contó con un diseño artístico distinto que contiene fotografías tomadas en el Brixton Academy de Londres y un mensaje escrito a mano por cada miembro de la banda.
La propia banda tuvo sentimientos encontrados sobre el álbum. Gillan crítico su actuación , mientras que Paice y Lord tuvieron una impresión muy positiva. Warner Bros. Japan guardó cuidadosamente las pistas grabadas de los tres conciertos para su uso en el futuro, cosa que hizo posteriormente.
Todas las canciones compuestas por Ritchie Blackmore, Ian Gillan, Jon Lord, Ian Paice y Roger Glover.
La cara A contiene dos canciones Highway Star y Child in Time ambas del 16 de agosto en Osaka. El doble disco empieza con «Highway Star» «Estrella de la carretera», una de las canciones más famosas del caracterizada por su solo de guitarra inspirado en temas clásicos y un solo de teclado inspirado en Bach. La canción aparece en su versión de estudio en el álbum de 1972 Machine Head, siendo el tema grabado con el tempo más rápido en dicho álbum.
El tema nació en un viaje de la banda en autobús a Portsmouth en 1971 cuando un entrevistador preguntó al grupo cómo componían sus canciones. Para hacer una demostración, el guitarrista Ritchie Blackmore comenzó a tocar un riff repitiendo la nota sol, mientras Ian Gillan cantaba unos versos improvisados. El tema fue mejorado esa misma noche.
La estructura de la canción consiste en una introducción de 35 segundos de guitarra, que al terminar deja paso al riff principal en el que se repiten dos veces las estrofas del tema. Comienza el solo de teclado que dura sobre un minuto y al terminar, Gillan empieza a cantar la tercera estrofa del tema que, al terminar, da comienzo con el solo de guitarra, y finalmente se repite la primera estrofa hasta el final de la canción.
La canción ha sido incluida en la banda sonora del videojuego Grand Theft Auto: Episodes from Liberty City (en la estación de radio ficticia LIberty Rock Radio 97.8) y en el videojuego Rock N' Roll Racing, y también aparece en la banda sonora de la película El Lobo de Courtois.
Le sigue "Child in Time" con de una duración de unos doce minutos creada para el álbum In rock de 1970.
La introducción es llevada a cabo por Jon Lord, que toca un solo con el órgano Hammond acompañado de la voz de Ian Gillan, de fuerza creciente, considerada por muchos como lo máximo a lo que puede llegar cualquier voz dentro del hard rock.
Durante la primera parte, lo más importante es, como se ha dicho, la actuación del Hammond y del vocalista acompañados ligeramente por la batería. Después, tras ir ganando en intensidad poco a poco, llega el clímax del tema. Fue escrita en 1969. Trata sobre el bien, el mal y la justicia; está basada en la muerte del padre del violinista David LaFlamme durante la Guerra Fría y en lo que sufrió el mismo David y se inspira en un riff de la canción "Bombay Calling" de una banda - It's a Beautiful Day- . Este riff era tocado por violines y con un tempo mucho más rápido. Es una de las primeras canciones de heavy metal y además su introducción presenta una serie de sonidos de carácter progresivo.
La cara B del primer LP comienza con el más famoso y reconocible de todos los temas del grupo «Smoke on the Water» - tocada el 15 de agosto en Osaka-
, una canción publicada en el álbum Machine Head en el año 1972. Es reconocida por su riff central, tocado por Ritchie Blackmore con una guitarra Fender Stratocaster que se ha convertido en uno de los riffs más famosos de la historia del rock mundial.
La canción cuenta la historia del incendio del Casino de Montreux el 4 de diciembre de 1971 durante un concierto de Frank Zappa cuando una persona del público arrojó una bengala hacia el techo del escenario y se incendió el lugar, que precisamente era el sitio en donde iba a empezar a grabar Deep Purple al día siguiente el álbum Machine Head. El humo del incendio sobre el lago Lemán inspiró la letra de la canción a Ian Gillan.
Es conocida por la simplicidad de su melodía de introducción
Tras Smoke aparece The mule – de su actuación del 17 de agosto en Tokio - publicada originalmente en 1971 en el álbum Fireball. La fama ha llegado a este tema por su puesta en escena en los conciertos del grupo, en las cuales siempre viene acompañada por un solo de batería de Ian Paice, que esa ocasión Paice tocó un solo de 6 minutos de duración, pero que no está incluido en el álbum, ya que aproximadamente la mitad de las pistas de audio de batería fueron borradas por error mientras se grababa la canción en el estudio. La canción empieza con el sonido de un tambor los primeros 10 segundos, justo después entran la guitarra de Ritchie Blackmore, el bajo de Roger Glover y el teclado de Jon Lord. Ian Gillan empieza a cantar entonces hablando de “The Mule”, y empiezan tres minutos y medio de solos de teclado y guitarra.
El lado 3 del segundo LP comienza con «Strange Kind of Woman» "Strange Kind Of Woman" es una canción perteneciente al quinto álbum de estudio de la banda británica Deep Purple, Fue lanzado como single a principios de 1971. Una canción originalmente se llamaria "Prostitute" por la que Gillan y Blackmore se batían en duelo Guitarra/Voz. Fue interpretada el 16 de agosto en Osaka
Tras esta vendría «Lazy» incluida en el álbum Machine Head en el año 1972 y tocada el 17 de agosto en Tokio. La canción comienza como solo instrumental del tecladista Jon Lord con su órgano Hammond, es seguida por el riff principal y con un intercambios de solos entre él mismo y el guitarrista Ritchie Blackmore. El vocalista Ian Gillan llega con las voces más adelante en la canción. También utiliza la armónica, tanto en la versión de estudio y en directo. Con más de 7 minutos de duración, es el tema más largo del disco, y versiones en vivo a menudo se extendieron más allá de 10 minutos. Para muchos es uno de los mejores temas del disco, junto al tema de cabecera Highway Star y el mítico Smoke on the water.
Finalmente acaba como era tradicional con «Space Truckin'» grabado el 16 de agosto en Osaka y que dura la friolera de más de 16 minutos. Tras el cual Blackmore rompió su guitarra.
El autor de la biografía del grupo, Dave Thompson, escribió: «La reputación del primer (y mejor) álbum en directo de Deep Purple apenas ha disminuido treinta años después de su lanzamiento». Por otra parte, Michael Lydon incluyó Made in Japan en su libro 1001 discos que hay que escuchar antes de morir. Yo, ya lo he hecho. Desde aquellos finales de los noventa vuelvo en reiteradas ocasiones al grupo, especialmente a mi querido Smoke on the water, y lo quiero publicar por ser hoy el "Día sin música".
La música estará siempre en mi recuerdo, aunque reconozco que yo ya no oigo, sino aquellos música que escuchaba en mi juventud. No estoy abierto a las novedades musicales y simplemente no me interesan. Considero que es cierto que el IVA cultural es caro, especialmente si lo comparamos con el de otros países, pero entiendo igualmente que es preferible que esté caro el IVA de la cultura, un 21 % , antes de que suba el IVA de los alimentos básicos o de bienes infinitamente más esenciales. La música no es un lujo, pero sí un placer, y los placeres los pagas, salvo que seas político, gente vinculada con las grandes empresas o incluso gente de la cultura. Seguro que ellos reciben más prebendas económicas y culturales que yo. Seguro que los invitan a un concierto antes que a mí.
Como siempre es un problema de dignidad y de trabajo. Ahora en España - como nunca ha ocurrido- afortunadamente se escucha más música en directo . Los músicos están siendo como cualquier hijo de vecino, trabajadores. Han de ir a trabajar para vivir, como cualquier ciudadano de este estado, y no cumplir con el sueño dorado de cualquier español, de cualquier sinvergüenza: vivir de las rentas. Un saludo