Vivir para ver

Ayer publiqué esto en los comentarios que se pueden realizar sobre determinadas noticias. Hacía tiempo que no publicaba nada, sobre todo, desde que el ambiente político en España es tan pestilente. Esta pestilencia que va de norte a sur, y de este - ozú como esta el este- hasta el oeste, y que afecta a toda organización española, pero que está dando su peor cara en los partidos, en todos, también los de IU- que se creen estos - ; sindicatos, insisto sindicatos, especialmente notorio uno, pero que el otro grande, primo hermano, y que sacude todas las Comunidades Autónomas españolas, yo diría que, eso,  en todas. Pero a esto se le suma esta extraña forma de democracia "callejera" - a mí que estro me recuerda tanto al fascismo como al bolchevismo- que últimamente es más poderosa que lo que se ha decidido en las urnas, me había alejado de la prensa , al menos, del comentario en la misma. 

Pero , al ver una noticia que publicaba el diario "El mundo", que hablaba de educación y que decía que Andalucía, País Vasco, Asturias, Cataluña y Canarias se resistirán a aplicar la LOMCE, - cosa con la que yo, que ni entro ni salgo, aunque , reconozco que hay puntos de la LOMCE que rechazo de plano,- argumentando que no da tiempo a poner la nueva ley en marcha este curso. Pues no he podido resistirme , más aún cuando he leído lo siguiente, y que era lo afirmado por nuestro Consejero de Educación, Luciano Alonso, que ha explicado así su estrategia: 

"Andalucía se rebela. No vamos a ser insumisos pero tampoco vamos a incumplir el Estatuto de Autonomía andaluz". Y ha enumerado el conjunto de medidas que van a comprender esta particular 'objeción de conciencia'. La primera, recuperar la extinguida asignatura de Educación para la Ciudadanía. También introducirán una educación "más humanística"; no darán conciertos a los centros de educación diferenciada por sexos; no publicarán los resultados de las reválidas o pondrán funcionarios públicos para la realización de estas pruebas. 

Ante esas declaraciones no he podido resistirme a escribir esto, esperando que ha nadie moleste, pues es en lo que creo. He escrito lo que sigue:

Podrían discutirse muchas cosas sobre la Lomce. A mí, como docente, muchas de ellas no me gustan, pero lo mismo digo de la que todavía, en este curso, está en vigor. Sin embargo, me llama la atención que uno de los argumentos -con los otros podría estar hasta de acuerdo - que esgrime Luciano Alonso para su oposición frontal a la ley sea la ausencia de la Educación para la Ciudadanía como materia. La Ciudadanía es la hora más absurda e inútil de las cursadas por nuestro alumnado en la ESO. Fue una ocurrencia para una hora de clase a la semana. Si quiere oponerse , que se oponga, libre es, pero, por favor, Sr. Alonso presente unos argumentos más rigurosos y no tan ridículos. Al final como funcionarios cumpliremos lo que diga la ley. Y luego, cuando cambie el Gobierno, éste, el que sea, impondrá la suya. Y llevamos...ni me acuerdo. Así nos va.

Y que quede claro, e insisto en ello que hay cosas de la LOMCE que me parecen horribles como el tema de los conciertos, todos, y no sólo los que segregan por sexo, que eso ya me parece indecente- , vigentes en España desde 1983, desde que el Gobierno de Felipe González lo puso de moda, firmando el primero y generalizándolo; el mantenimiento de la religión, de la que no reniego, pero que pienso que la escuela no es su sitio, y , si no existe religión no habría su alternativa, o esas reválidas, que me parecen absurdas. Pero que quede claro que lo actual tiene los malos resultados que tiene y que , los que niegan la LOMCE, siguen defendiendo un modelo de selectividad que impide que muchos alumnos/as puedan estudiar lo que les motiva. Pero nada, lo esencial, la Ciudadanía. Vivir para ver. .