viernes, 22 de septiembre de 2017

La ciudad de los ojos grises


Último libro veraniego. El elegido ha sido La ciudad de los ojos grises , un título poético para hablar de una historia en pasado y en presente de una ciudad que se desarrolló espectacularmente a finales del siglo XIX en base a sus minas de hierro. Un escritor vasco, pero de origen castellano leónes, y hoy asentado en Sevilla, Félix González Modroño, es el autor de esta obra que parece homenajear al Bilbao rural, el que muere, y al que nace, el industrial, que florece ya marchito. 

Modroño es esta obra escrita en 2012 y que fue recompensada con el Premio a la "Mejor novela 2012" para Blogs Literarios y el "Premio libreros de Bizkaia 2013", para presentarnos la ciudad que parece amar busca a un personaje, en este caso un arquitecto y profesor que enseña en París, Alfredo Gastiasoro, que retorna a su ciudad natal cuando casualmente lee la prensa y se entera de dos noticias que le impacta: el incendio del Teatro Arriaga y la muerte por ahogamiento de la mujer que le ha marcado la vida, Izarbe , su gran amor desde la infancia. Una vez en la ciudad recorre las calles que , en parte, él ha visto nacer y modificarse, tras el "boom" económico, urbano y demográfico de la ciudad. Al llegar descubre para su sorpresa que la muerte de esta mujer, que resulta ser su cuñada, al estar casada con su hermano, Javier, con el que no tiene casi contacto, ha sido un asesinato algo que le comunica un viejo amigo, Fernando, policía y "bizkaitarra". 

Desde ese momento ambos, Alfredo y Fernando, intentan reunir los datos para esclarecer un caso que se mueve entre los bajos fondos de la prostitución, la pobreza, el nacimiento del movimiento obrero, el espionaje en el contexto de la gran guerra, el ansia especulativo de la burguesía y la resolución de enigmas del presente y del pasado que tienen mucho que ver con los ojos grises, con el amor, también, el imposible y, sobre todo, con el irrefrenable cambio que supone el paso del tiempo en las personas y en ese "organismo"vivo que es una ciudad. 

Por cierto, el libro que me fue recomendado por mi mujer y que opinó - ya en su momento - lo mucho que le gustó en esta entrada de su blog, Los libros que me acompañan, está magníficamente escrito, grandiosamente documentada, repleta de anécdotas e historias locales, y que es cerrado con maestría no dejando cabo alguno en una historia en la que uno lamento no conocer más y mejor esta ciudad cisne en la que se está convirtiendo Bilbao. Además lo hace con un estilo ágil y preciso, muy cuidado, muy grato para la lectura. Y para acabar os pongo lo que he encontrado que enmarca de manera oportuna ese paisaje urbano protagonista igualmente de la obra. Un saludo.

 

domingo, 10 de septiembre de 2017

El hombre de San Petersburgo


Este año he visitado la antigua capital imperial. Cuando buscaba información sobre la misma, di con este libro escrito por Ken Follet. Como siempre hago, jamás me informo sobre lo que va el mismo y me lanzó al vacío. Ya sabéis que en ocasiones me he estrellado, pero en este caso no. Eso sí, ha estado muy por debajo de las expectativas. Esperaba una obra que se desarrollara más por las calles de la ciudad fundada en los canales y ribera del Neva, pero no; me he vuelto a encontrar con un Follet , tan británico como siempre, en estado puro, que centra su obra en el Londres prebélico agitado por las sufragistas y por los "tambores de guerra", en este caso en relación a la Gran Guerra, en la diplomacia alambicada de la época, en una historia de amor con pasado y con presente, en la recreación de personajes históricos, en historias verosímiles, pero inciertas desde el punto de vista histórico, así como en Félix Kschesinkski, un asesino implacable que asume el protagonismo en este hombre de San Petersburgo que busca poner fin a otro hombre de San Petresburgo, Aleksei Orlov o el príncipe Orlov.

Ken Follet escribió el libro en 1982. El escritor galés ya se había presentado en sociedad firmando con su propio nombre y no con seudónimo como había hecho hasta 1977, con tres obras que han pasado por este blog- Las islas de las tormentas (1978), Triple (1979) y La clave está en Rebeca (1980)-. Responde como las anteriores a su estilo, ágil, con personajes que quedan bien trazados casi desde el principio, hilando magníficamente esta historia y contextualizándola sin entrar en en grandes profundidades, pero  trazando un marco más que adecuado. En el mismo van surcando miembros de la aristocracia británico de preguerra como los Walden, encabezando el grupo Lord Stephen Walden, su esposa de origen ruso, Lydia, con un pasado oculto que en un momento fluye, y su joven hija Charlote, educada en la inocencia más absoluta, llegando hasta extremos inauditos.

La obra se lee con gusto, pero desde mi punto de vista no llega a ser apasionante, posiblemente por una historia  de amor que lastra el conjunto y por ser el reino de las casualidades.  Dice mi mujer , lectora voraz, en la  entrada correspondiente a este libro que podéis encontrar en su magnífico blog "Los libros que me acompañan" que es una historia basada en la casualidad. Es cierto, que la suma de casualidades suman una vida, pero que se den todas es francamente difícil, en ocasiones, como la historia de este relato , improbable, pero ¡oye! esto es novela, y la novela juega legítimamente con  el azar. Un saludo